Linderos se caracteriza por ser una localidad rural con amplios terrenos agrícolas, en los que se cultivan diferentes frutas además de productos como maíz, trigo y porotos. Forma parte de la Ruta del Vino del Valle del Maipo y la Viña Linderos se destaca por ser la más antigua del sector. Todos los años acuden gran cantidad de personas para la celebración de la fiesta de Nuestra Señora de Teruca, el 20 de septiembre, y de la Semana Linderana, durante el verano.
Don Oscar Guajardo llegó a vivir a Linderos cuando tenía 21 años, al paso del tiempo conoció a su señora, con quien se casó y formó familia. En 1968 ingresó a trabajar en la Maestranza de Santiago como Tornero, ahí fue aprendiendo y desempeñando las diferentes labores asociadas a la reparación de los trenes y de las vías férreas, para finalmente ejercer como Supervisor de Maestranza hasta 1995, cuando debido a una reestructuración de la empresa, él y varios de sus antiguos compañeros que también llevaban más de 25 años de servicio, cesaron sus funciones y fueron indemnizados. En ese momento don Oscar tenía 46 años. Con los recursos recibidos arrendó la mitad de la antigua bodega de la estación de Linderos e instaló un taller de torno y estructuras metálicas. Además, a partir de 1998 comenzó a vivir en el antiguo edificio de la estación, el cual remodeló para estos fines. Señala sentirse muy agradecido y feliz de haber trabajado en ferrocarriles, ahí conoció mucha gente e hizo grandes amigos, con quienes continua viéndose.
Al momento de la entrevista, el antiguo edificio de color azul se mantenía deteriorado pero aún en pie, y con varias de las antiguas habitaciones bien conservadas en su interior, como la boletería. El perímetro del recinto fue cercado por el propio Don Oscar para evitar que el inmueble siga dañándose. A unos metros se encuentra la boletería del Metrotren Rancagua – Estación Central. Don Oscar relata que un ex subsecretario de transporte que residía en el pueblo contribuyó a que la estación se restaure y forme parte de las detenciones del Metrotren, lo cual fue muy positivo para Linderos ya que provocó una reactivación del pueblo. Considera que todas las antiguas estaciones son parte del patrimonio histórico nacional y le gustaría que el tren de pasajeros se reactive y vuelva a llegar a lugares como Puerto Montt, San Antonio o Valparaíso.